Lesiones Meniscales y Ligamentarias
Lesiones Meniscales
Los meniscos son dos piezas de cartílago en forma de C que actúan como amortiguadores entre el fémur (hueso del muslo) y la tibia (hueso de la espinilla). Las lesiones meniscales pueden ser agudas, resultantes de un movimiento de torsión de la rodilla mientras el pie está fijo en el suelo, o crónicas, debido al desgaste a lo largo del tiempo.
Síntomas
Tratamiento
El tratamiento puede variar desde conservador hasta quirúrgico, dependiendo de la severidad de la lesión y los síntomas del paciente:
Lesiones Ligamentarias
Los ligamentos son bandas de tejido resistente que conectan los huesos entre sí y estabilizan la articulación de la rodilla. Las lesiones ligamentarias comunes incluyen:
Ligamento Cruzado Anterior (LCA): Lesión frecuente en deportes que involucran paradas bruscas, cambios de dirección o saltos.
Ligamento Cruzado Posterior (LCP): Menos común que las lesiones de LCA y a menudo causada por un impacto directo en la parte frontal de la rodilla.
Ligamentos Colaterales (medial y lateral): Afectados generalmente por impactos laterales en la rodilla.
Síntomas
Tratamiento
El enfoque específico para cada paciente debe ser personalizado, considerando su nivel de actividad, objetivos y la gravedad de la lesión. Las lesiones meniscales y ligamentarias pueden tener un impacto significativo en la movilidad y calidad de vida del paciente, por lo que es crucial un diagnóstico y tratamiento adecuados para promover una recuperación exitosa y minimizar el riesgo de complicaciones futuras.
El tratamiento varía según el ligamento afectado y la gravedad de la lesión: